INICIACIÓN A LA CUNICULTURA:
Esta actividad comienza a desarrollarse en la época de los romanos para satisfacer las necesidades alimentarias del hombre, desde entonces ha ido creciendo y perfeccionándose acompañada con la aparición de empresas productoras de
insumos específicos lo que ha llevado a que la cunicultura a nivel mundial se la encuentre en el mismo nivel de cualquier empresa comercial.
La producción
cunicular es una alternativa interesante, especialmente para las pequeñas y medianas empresas de tipo familiar que pueden destinar una excelente mano de obra a ésta actividad. La crianza del conejo se realiza fundamentalmente por su carne; que tiene entre otras características un alto valor proteico, bajo tenor graso, alto contenido de vitaminas, calcio, fósforo y escaso contenido de colesterol y que además se comercializa en supermercados, granjas, carnicerías y frigoríficos. Pero además tiene una serie de subproductos que también se pueden comercializar, como el pelo, cueros, vísceras, estiércol, piel, sangre y animales de laboratorio. A nivel nacional la actividad se desarrolló en los últimos años permitiendo la apertura de las exportaciones, el volumen exportado en el 2002 fue de 250.491 cabezas, lo que significó un aumento del 92% en la faena de conejos con respecto al año anterior, el destino de las mismas fue España, Austria y Brasil. Pero a pesar del incremento en producción Argentina aun no cuenta con el volumen necesario para hacer frente a las exigencias de los países importadores.
Características de la carne de conejo:
1-Rica en proteínas.
2-Menor tenor graso (3 veces menor que la carne vacuna y la mitad que la de pollo).
3-Mayor relación carne-hueso que el pollo por esto rinde un 30% más que este último.
4-Aporta a la dieta, cantidades importante de calcio, fósforo y vitaminas.
5-Es fácil de digerir.
6-Recomendado para niños, personas mayores y especialmente para aquellos con elevado colesterol, riesgo de arteriosclerosis y enfermedades
cardiovasculares.
LAS RAZAS:
Las razas para producción de carne son exclusivamente:
Neocelandesa: cuyos caracteres más sobresalientes son
prolifericilidad, buen ritmo de producción, en las hembras: actitud lechera, instinto maternal, gazapos con mayor peso, forma alargada, tranquilidad, etc.
Californiana: que se destaca por su rapidez de crecimiento, conformación muscular, resistencia a enfermedades, etc. y la combinación de ambas buen peso de la canal, óptimo índice de transformación alimenticia, buena conformación, excelente rendimiento comercial, etc. pero existen numerosas otras, según el objetivo de la producción, doble propósito (carne-cuero) o solamente pelo.
BIOLOGÍA:
El conejo es un animal cuyo ciclo de producción es rápido y corto, (42-50 días), una vez nacido el gazapo llega a faena entre los 80-90 días. Las hembras de una gran fertilidad están gestando y amamantando al mismo tiempo, su ciclo de gestación es de 31-32 días. Especie famosa por su
prolifericilidad, el conejo es un herbívoro capaz de transformar las proteínas vegetales que el hombre consume poco o nada, en proteína animal de alto valor biológico, su alimentación es a base de balanceado
pelleteado que contiene todo los elementos necesarios para su óptimo desarrollo y producción.
MÉTODO:
Recepción de los reproductores, edad de servicio 4 y 7 meses la hembra y el macho respectivamente. Servicio, gestación (31-32 días) preparación de nidos,
parición,
amamantamiento, nuevo servicio, destete (30 días), gazapo a engorde hasta 90 días, madre, nueva
parición.
Sanitariamente el conejo es un animal que no padece ninguna enfermedad transmisible al hombre y que si se trabaja correctamente prácticamente carece de ellas. Lo más frecuente en un criadero es sarna (parásitos externos), diarreas (parásitos internos). Para tranquilidad del productor, vacunación contra
mixomatosis,
virósica.
ELABORACIONES:La carne de conejo tiene las mismas aplicaciones culinarias que la del pollo, siendo más
rendidora por su consistencia y magra por su composición. Las formas de preparación en milanesas, arrollados, guisos, estofados, salsas, patees, parrilla, horno y toda la gama de platos que su imaginación sea capaz de crear.
COMERCIO:A nivel mundial, existe la falta de capacidad productiva de la Unión Europea, donde hay grandes productores como Italia (212.000
TN) y España (120.000
TN) pero no llegan a satisfacer la demanda. También son grandes consumidores estando en el orden de los 7
Kg.
per cápita por año, es decir que la brecha entre producción y consumo es amplia dejando un espacio a cubrir con producción proveniente de otros países.En nuestro país, el consumo no supera los 100
gr.
per cápita por año, si bien a través de la difusión (televisiva, radial, periodística, etc.) la demanda interna se está incrementando y lo seguirá haciendo en un futuro mediato, nuestra oferta no es suficiente para abastecer los dos mercados. Si los cunicultores pueden bajar los costos de producción y aumentar el número de animales el país tendría muchas posibilidades de convertirse en uno de los principales exportadores mundiales. A nivel provincial se está orientando al productor y su producción a obtener un producto diferenciado con una denominación de origen a través de un protocolo único de trabajo, para que el conejo terminado tenga una tras habilidad asegurada lo que permitirá un mejor posicionamiento en el mercado interno y externo.
PROGRAMA:
Es una actividad que puede desarrollarse con mano de obra familiar, incluyendo en ella a niños, ancianos y discapacitados, por la facilidad de movimiento brindada por el bajo peso de los animales. La escala de producción recomendada para iniciarse en la actividad es de un plantel de 10 madres y un 10% de machos. Con este número, la actividad no es rentable, pero permite alcanzar 3 objetivos fundamentales: conocer perfectamente el manejo del plantel (importantísimo), incrementar el número de hembras a partir de él y con la venta de la producción solventar el gasto de su alimentación.La escala a partir de la cual empieza la rentabilidad a ser interesante es de 50 madres y 5 machos, donde se puede explotar como actividad alternativa de otra principal hasta las 300 madres a partir de éste número se la puede considerar como actividad de ingreso único.
